martes, 26 de diciembre de 2017

Dos extraños muy extraños





La primer vez que llegué a la clase de Mr. Dennis, sinceramente estaba convencido de que iba a ser una tarea difícil. 
De hecho, ya conocía a un par de alumnas suyas pues comparten el mismo bus que yo y, nuestra relación era distante. Cabe suponer que por la edad.


Desde el inicio de curso, a partir de mi colaboración semanal,  me he dado cuenta de que todo aquello que me había hecho pensar que iba a ser muy difícil poder ayudar, colaborar, trabajar con los alumnos y alumnas de esta clase no era ni mucho menos tan complicado.
 Al ser una generación diferente a la mía y con el cambio tan rápido de las nuevas generaciones, la distancia entre su generación y la mía en la manera de entender el mundo es muy grande. Pese a esto, una vez aclimatado y adaptado, empecé a entender a los niños y niñas  mejor y nuestra relación fue mejorando con el transcurso de las semanas. 
En la clase, mi ayuda consiste en reforzarles el aprendijaze de las matemáticas, ya que ésta es la tarea que me encomendó Mr. Dennis la cual, por otra parte, estoy realizando con el mayor de los placeres. De hecho me encuentro bastante cómodo,  ya que se me dan bien las mates y por tanto,  puedo ayudarles fácilmente.


Los resultados hasta este momento son bastante favorables, ya que las notas de los niños a los que les presto una mayor ayuda están mejorando mucho y la relación con todos ellos, incluyendo la de las niñas del bus ha ido mejorando muchísimo. Tanto ha mejorado que el día 22/12/17 me hicieron una tarta y me ofrecieron una porción cuando fui a cantar con Papá Noel y los elfos. 

La verdad es que ahora estoy muy agusto en la clase de Mr. Dennis.

Por Ximo Beltrán Y12V